Acompaña a los pacientes en todo su proceso, desde la fase prequirúrgica hasta el día de la cirugía, brindando apoyo constante, atención personalizada y una experiencia positiva y reconfortante.

Su amabilidad y empatía le permiten conectar genuinamente con cada persona, entendiendo sus necesidades y brindando respuestas claras.

Además de gestionar los aspectos administrativos, aporta un valioso apoyo emocional que transmite confianza y serenidad.